FIESTA DE SAN ANTONIO MARÍA CLARET - 2025 | MENSAJE DEL SUPERIOR GENERAL
- Autor: P. Mathew Vattamattam, CMF
- Fuente: claret.org
Queridos hermanos:
¡Una gozosa y bendecida fiesta de nuestro querido Fundador, San Antonio María Claret, para cada uno de ustedes!
Al celebrar su fiesta en este Año Jubilar, volvemos a su vida como a una fuente de inspiración evangélica. Claret nos enseña a caminar como peregrinos de esperanza y artesanos de paz en un mundo hambriento de sentido. Al contemplar sus misiones, nos asombra ver cómo la gente acudía en gran número a escucharlo, no buscando espectáculo ni provecho alguno, sino el Pan de la Palabra y el fuego de la Esperanza. Las multitudes que llenaban la catedral de Vic —tan colmada que incluso una vez se desplomó la pila bautismal— acudían porque Claret era un hombre que alimentaba las almas. En él, la Eucaristía celebrada y la Palabra proclamada se convirtieron en alimento para el cansado, luz para el confundido, consuelo para el herido y esperanza para el pobre.
¿De dónde aprendió Claret tal ternura y ardor apostólico? Lo aprendió en la escuela de María, Madre y Formadora de los apóstoles. Con los años, fue madurando en él un profundo y materno espíritu de cuidado. En aquella conmovedora nota de 1870 —una de las últimas— contempló a María y vio a sus Misioneros como «los brazos y los pechos maternales» por medio de los cuales Ella alimenta a sus pequeños con sabiduría y amor. En un tiempo como el nuestro, saturado de imágenes erotizadas, tal lenguaje puede sorprender; sin embargo, para Claret era un lenguaje místico y eucarístico: un símbolo del amor oblativo que genera vida, una llamada a nutrir a los demás con lo que nosotros mismos bebemos del Corazón de María y del Corazón de Cristo.
Ésta, hermanos, es la llamada que nosotros recibimos hoy: ser hombres que alimentan la esperanza, que generan vida a su alrededor; formar comunidades que sean hogar, mesa y refugio; ejercer ministerios que nutran, sanen y eleven a quienes se nos confían. El Reino de Dios —que Jesús vino a anunciar— sigue siendo la gran visión alternativa que nuestro mundo anhela. No tengamos miedo de testimoniar esta esperanza con claridad, compasión y valentía.
Como peregrinos en este Jubileo, bebamos como Claret de la fuente del Amor auténtico, que es el único capaz de saciar los más profundos anhelos del corazón humano. Y como hijos del Corazón de María, que broten de nuestro interior ríos de agua viva (cf. Jn 7,38), llegando a los desiertos del corazón humano y haciéndolos florecer con vida nueva.
Encomiendo a cada uno al Inmaculado Corazón, para que Ella nos haga, como a Claret, buscadores apasionados de Dios y servidores incansables de nuestros hermanos.
¡Feliz fiesta de nuestro Fundador!
P. Mathew Vattamattam, CMF
Superior General
Roma, 24 de octubre de 2025.
CURIA PROVINCIAL
OFICINAS
Av. Cuauhtémoc 946,
Narvarte, Benito Juárez,
03020, Ciudad de México
Tel. 55.55.43.51.72
_________________
PARA ENVÍOS
Templo de San Antonio María Claret
Cuauhtémoc 939.
Col. Narvarte, Benito Juárez
03020, Ciudad de México
Tel. 55.55.43.27.66 / 55.56.69.15.59
