RELIQUIA SAN JUDAS TADEO
- Fecha: 03-08-2024
- Autor: Lic. Rosalina Oliva Duran
La comunidad del Templo de San Hipólito y San Casiano recibió con mucha alegría la reliquia del Apóstol de Jesús, Patrono de los “Casos Difíciles y Desesperados”, San Judas Tadeo.
En punto de las 8:30 de la mañana dio inicio la Misa de bienvenida de la reliquia del Santo, la cual fue concelebrada por los PP. Manuel Delgado, Juan Manuel Buzo, Humberto Rodríguez y Jesús García, y por los HH. Sabás García y Juan Carlos Bugarín. El ambiente que se pudo percibir fue de recogimiento, pero también de celebración de parte de los feligreses asistentes.
La homilía la realizó el P. Manuel, tomamos algunos extractos:
“Hemos recibido un regalo de Dios para todos nosotros los devotos de San Juditas Tadeo”.
“El Evangelio trata de la llamada que hace Jesús a los discípulos para una gran misión y esa gran misión es amar. Los discípulos tuvieron esa gran tarea de amar y transmitir todo lo que ellos aprendieron de Jesucristo. Todo que aprendió San Juditas fue principalmente amar, porque el recibió el amor de Dios y lo supo transmitir. San Juditas sigue transmitiendo el amor de Dios para todos nosotros”.
“Cuando un extranjero llega a nuestro México se enamora de nuestro país, recordemos a San Juan Pablo II. Él se enamoró de México y México se enamoró de él. San Juditas se enamoró de México y nosotros nos enamoramos de San Juditas”.
“Hermanos, el amor lo puede todo y más cuando es bendecido por parte de Dios. Hoy San Juditas nos sigue transmitiendo ese gran cariño, ese gran amor, ese gran respeto. Él sigue trabajando por nosotros, siendo ese gran intercesor ante Dios. Porque tiene un gran corazón, porque ama a nuestro México. San Juditas ama a México”.
“Que nos vayamos con los brazos abiertos, con las manos abiertas dispuestas a trabajar y servir por el prójimo, como lo está haciendo San Judas Tadeo. Él está aquí como servidor. Él lo aprendió de Jesús. Recordemos: El Hijo del Hombre no vino para ser servido (Mt 20, 28). De esa manera lo hace San Juditas con todos nosotros. Entonces, hermanos nuestra primera tarea como fieles seguidores de Cristo, a través de San Juditas Tadeo es el servicio a los demás necesitados. Comenzando en casa. Un servicio no solamente a la ligera, eso no tiene fruto, un servicio donde la semilla del amor de Cristo está ahí presente, pero que está dando fruto, que sigue creciendo y sigue dando fruto, frutos de amor de misericordia, frutos de sensibilidad, frutos a través de nuestras personas mostrando a un Cristo que vive siempre en nuestro corazón”.
“Recordemos lo que San Juditas nos sigue mostrando, en cada imagen de San Juditas nos está señalando su medallón y en el medallón está Jesús. Él trae su medallón cerca del corazón. San Juditas nos está indicando que Cristo debe estar cerca de nuestro corazón, en centro de nuestra vida. De esta manera podemos seguir nosotros esos grandes apóstoles sirviendo en el nombre de Cristo a ejemplo de San Judas Tadeo. Bendiciones para todos”.
Terminado la Misa, se impartió la bendición solemne a todos los presentes.
Fueron transcurriendo las horas, las largas filas y la espera no importaron para estar ante la reliquia del Santo y tener un pequeño encuentro con él. Niños, jóvenes, abuelos, familias se congregaron para dar gracias a Dios por este regalo.
Gracias a Dios pudimos acercarnos a estas personas y recopilar mediante una pequeña entrevista lo siguiente: Los abuelos y mayores pidieron a San Juditas por su salud, familia y trabajo, pagaron mandas y pidieron por sus hijos y nietos. Los niños le pidieron que cuidara a sus abuelitos y papás, un juguete, una bendición, por su felicidad, por sus mascotas, para que les ayude en la escuela, por la salud, por su familia. Los padres pidieron por la familia, aumentar la fe, por su negocio y bendiciones para los hijos, no podía falta quien pidiera por nuestro querido México. Los jóvenes pidieron por la familia, para que los cuide, por sus estudios, acciones de gracias por que está la reliquia en México, protección, acompañar al amigo en su pena. Hubo personas que traían sus perritos, los cual nos habla que es una devoción que cuida la creación.
Su sentir al estar frente a la reliquia: Algunos expresaban mucha paz y felicidad, los invitaba a ser buenas personas, decían que es reencuentro con Dios, una emoción incomparable, lágrimas.
No faltó quien regalara un rosario, flores, escapularios, veladoras, comida.
Acudieron diversos medios de comunicación (televisión, impresos, internet…), con el fin de cubrir la noticia, pero sobre todo de captar los rostros de tantas personas que reflejaban tantas emociones, inocencia, súplica, paz, dolor, llanto al estar frente la reliquia.
Queremos externar nuestro agradecimiento a Dios y a tantas personas que colaboraron a traer la reliquia desde el Vaticano y de tanto benefactores y voluntarios. Es lo que llamamos “Hacer con otros lo que solos no podemos”.
Sigamos caminando juntos de la mano de Jesús y de San Judas Tadeo.