SAN JUDAS ATIENDE A TODOS

En Jerusalén había hecho diversos milagros, en Galilea había convertido el agua en vino. De entre la gente algunos quedaron muy sorprendidos pero otros quedaron muy enojados por comentarios que Jesucristo añadió. Ahora que vuelve Jesucristo a Galilea se encuentra con un funcionario real que tiene a su hija muy enferma, le pide que vaya a su casa para curarla. Judas y sus compañeros acompañaban a Jesucristo y sabían cómo habían tratado a Jesucristo y comprenden porqué Jesucristo pone unos reparos: “Uds. Si no ven signos y prodigios no creen" (lo decía por el funcionario y sus compañeros".) Anteriormente había expresado que ningún profeta es reconocido por sus conciudadanos. Ahora es testigo de que en ese ambiente adverso Jesucristo ayuda a quien se lo está pidiendo. Ahora ve a Jesucristo que acepta esa fe deficiente e impulsa su crecimiento.

¡Cuántos de costumbres no siempre correctas y de fe defectuosa, acuden a San Judas buscando un milagro! Después de recibir su ayuda que no se olviden de mejorar su fe y sus costumbres.